Las prensas producen tarjetas de plástico
Tiepner diseñó este sistema de fabricación de tarjetas para que lo manejara una sola persona en una operación de tres turnos. Foto cortesía de TOX Pressotechnik
En la laminadora se instalan tres servoprensas: dos en las prensas de calentamiento y una en la prensa de enfriamiento. Foto cortesía de TOX Pressotechnik
El sistema puede producir 2.000 tarjetas por hora. Foto cortesía de TOX Pressotechnik
Las servoprensas son más silenciosas y económicas de operar que las prensas neumáticas. Foto cortesía de TOX Pressotechnik
Las servoprensas TOX están diseñadas para procesos altamente dinámicos. La potencia se transmite desde el servomotor a través del accionamiento planetario. Foto cortesía de TOX Pressotechnik
Todo el mundo tiene muchas: tarjetas de crédito, tarjetas de cliente, tarjetas de socio. Incluso los permisos de conducir y los documentos de identidad se fabrican desde hace mucho tiempo en formato ID-1, el tamaño estándar internacional para tarjetas de crédito y débito. Es imposible imaginar la vida cotidiana sin montones de estas tarjetas de plástico que engordan la billetera.
La empresa Tiepner GmbH, con sede en Dietfurt (Alemania), fabrica desde hace más de 40 años herramientas y máquinas para soldar plásticos. La clientela de la empresa abarca desde proveedores de automóviles hasta fabricantes de dispositivos médicos. La empresa también fabrica sistemas de laminación automatizados para producir tarjetas de crédito, tarjetas de débito y otras tarjetas de plástico.
Teniendo en cuenta que no tienen partes móviles, estas tarjetas pueden ser sorprendentemente complejas. Constan de varias capas de lámina, que pueden contener diferentes elementos, como estampados, chips, bandas magnéticas, elementos de seguridad, hologramas o RFID y módulos de memoria.
Los sistemas de Tiepner se personalizan para los requisitos específicos de cada cliente, pero el proceso básico de fabricación es el mismo: compaginar la lámina, laminar, perforar y finalmente comprobar las tarjetas completadas. El elemento central de cada sistema Tiepner es la unidad de laminación, que se basa en servoprensas de TOX Pressotechnik GmbH & Co.
En primer lugar, se pueden clasificar automáticamente hasta ocho láminas diferentes a partir de una hoja o carrete y apilarlas una encima de otra. La alineación precisa de uno encima del otro mediante el registro de impresión está garantizada por un sistema de visión artificial. Cada capa de lámina contiene módulos y características específicas, según la tarjeta que se esté produciendo. A continuación, el folleto de láminas se entrega a la unidad de laminación, que une esta pila de láminas de forma irreversible.
Una mesa indexadora giratoria envía este folleto en láminas intercaladas a la prensa calefactora, que consta de dos punzones calentados, uno en la parte superior y otro en la parte inferior, que se pueden calentar hasta 200 C. La prensa calentada ablanda las láminas de plástico y las une. juntos. Luego, se utiliza una prensa de enfriamiento para bajar la temperatura del conjunto y estabilizar el plástico.
El proceso de laminación se produce en tiempos de ciclo de 18 segundos. Luego, el sistema envía el paquete laminado al punzonador. Al final del proceso, se comprueba la precisión del tamaño, la calidad de la superficie, la función RFID y otras características de las tarjetas perforadas antes de apilarlas en un cargador.
"Siempre hemos utilizado los TOX Power Packages para el proceso de laminación porque son fiables y robustos", afirma Christian Höltge, director general de Tiepner. “Pero ahora hemos sustituido los Power Packages que funcionan con aire comprimido por el TOX Electric Drive en una máquina nueva. Es el primer sistema con accionamientos de prensa electromecánicos, que presentan muchas ventajas para esta aplicación.
“Estos accionamientos de prensa se pueden configurar con precisión y funcionar con mayor precisión. Sobre todo son más silenciosos, lo que es especialmente apreciado por los empleados. Además, los datos se pueden leer y analizar. Por ejemplo, podemos crear procesos de desplazamiento de fuerzas y evaluar datos de rendimiento para control de calidad y trazabilidad”.
Con los módulos eléctricos TOX también ha mejorado el funcionamiento del sistema, afirma Höltge. Y lo que es más importante, el sistema en su conjunto se ha vuelto más económico de operar, ya que ya no se necesita aire comprimido costoso.
En la laminadora están instaladas tres servoprensas electromecánicas TOX: en las prensas de calentamiento dos accionamientos EX-K con husillos roscados planetarios y en la prensa de enfriamiento un accionamiento EPMK con sensores para medir la fuerza y la posición. Estos accionamientos están diseñados para procesos altamente dinámicos. La potencia se transmite desde el servomotor a través del accionamiento planetario y del husillo planetario al émbolo de trabajo y, por tanto, a la herramienta. TOX suministra los módulos de potencia electromecánicos como unidades premontadas y listas para conectar.
"Con TOX Pressotechnik mantenemos buenas relaciones comerciales desde hace más de 20 años", afirma Höltge. "La cooperación siempre es sencilla y fluida, y tenemos un contacto designado que brindará asistencia inmediata en caso de que sea necesario".
Con el sistema actual, Tiepner ha realizado el sistema de producción de tarjetas técnicamente más complejo hasta la fecha. La máquina mide aproximadamente 8 metros de largo, 5 metros de ancho y 3 metros de alto. Está diseñado para ser manejado por una sola persona en una operación de tres turnos. Produce 2.000 tarjetas por hora, cada una de exactamente 85,6 milímetros de largo, 53,98 milímetros de ancho y con esquinas redondeadas.
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